Todo reino tiene a su reina. La nuestra se llama Aranza Osoro, la reina vikinga que vino de Argentina.
El mundo de los vikingos cobra vida a través del viaje de Ragnar Lothbrok, el primer vikingo que entró en las páginas de la historia desde las leyendas nórdicas. Ese pueblo nos transmite fuerza, coraje, capacidad para superar el dolor.
Si eres fan del pádel femenino te habrá venido a la cabeza una rubia que reúne todas esas cualidades, y algunas más.
A los que la vemos entrenar admiramos su capacidad de lucha y la potencia que transmite. Fuera de pista es una chica joven, casi tímida, con un acento dulce. Siempre con una sonrisa en la boca.
Nunca dice no cuando le pides algo. Combina ese halo de misterio entre estrella mundial de un deporte que cada vez está más al alza y, niña humilde.
Este año ha llegado la hora de la superación. Hasta este momento bregaba entre pistas por hacerse un hueco entre la élite.
Ya no le basta con ganarlo todo en Cataluña y ha dado el salto cualitativo definitivo. Su alianza con Carolina Navarro ha bastado para que en el primer torneo que han jugado juntas se haya plantado en semis.
Se juntan una Ulrich y una Björk. Sus madres vinieron del norte, agárrense los machos.
Le dijeron que jugara a la derecha y no le ha importado. Le cambiaron la pala a principio de año. Le propusieron un nuevo entrenamiento y plan físico y bajó kilos de manera espectacular.
Nosotros desde fuera la hemos ido observando como un cometa que pasa cerca de ti y que puedes admirar con más detenimiento que ese sol más lejano.
Sabemos que no le importa el sacrificio que le vayan a pedir porque tiene sólo una idea en mente: ser campeona. Lo que quizá no sabe es que para la gente que la rodea, ya lo es.
Para su madre es un referente. La vimos llorando desconsolada, de alegría, en Barcelona. Su video se ha hecho viral y el que no se haya emocionado viéndolo es que ni le gusta el pádel ni sabe lo que es el deporte.
Para sus amigos es el alma de la fiesta. Allá donde va, tiene. En cualquier club es bienvenida y de donde sale la respetan y la quieren por igual.
No escribo así por mandato de nadie. Se lo merece.
La he tenido cerca para preguntarle una cosa que me llamó la atención en el WPT celebrado en el Palau Sant Jordi, en Barcelona.
- ¿Qué le decías a Carolina mientras teníais delante a Las Gemelas?
- Pues le daba ánimos y le decía que lo podía conseguir.
¿Alguien duda del potencial de esta paranaense de 24 años? En su primera semifinal y le dice a su compañera, 9 veces número 1 del mundo, que se anime y que lo puede conseguir…es la bomba.
No es la primera vez que la entrevisto, y a este ritmo estoy seguro de que no va a ser la última. Ojalá un día la felicite por ser la nueva número 1 en el ranking. Eso está por ver, pero aunque nos confinen, nadie nos impide soñar.
Lagertha ya no es la reina de HBO. Aquella que representa a su pueblo y que lucha y ama a la vez, ahora, se llama Aranza, la reina vikinga que vino de Argentina para quedarse. Ha cambiado un hacha por una Head Delta, y no está dispuesta a hacer rehenes.